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    Todos los puntos visitados a lo largo del día están recogidos en este mapa de «Italia»: ver mapa.

    Para PASARLO A LA APP MAPS.ME (que es la que me guía en todos mis viajes y rutas por mostrar mucho mejor los senderos que Google Maps y por funcionar a la perfección sin conexión) solo tenéis que seguir estas instrucciones.

    Sábado 21 de octubre de 2023

    LA SPEZIA

    Desayunamos en nuestro apartamento, el 5 Terre Cozy Apartments, reorganizamos el equipaje y hacemos el check-in de los billetes de tren que vamos a tomar esta mañana, a través del e-mail que me enviaron cuando los compré. El check-in solo está disponible a partir de la medianoche del día del viaje.

    Dejamos el alojamiento a las 9:45 horas. Hemos quedado muy contentas con nuestra estancia aquí:

    • Por su perfecta ubicación, a solo dos calles de la estación del tren que nos llevó por los distintos pueblos de las Cinque Terre.
    • Por su amplitud y luminosidad.
    • Por estar bien provisto de toallas, gel y champú, secador de pelo…

    Como contrapartida os diré que es imprescindible venir con tapones para los oídos y antifaz en caso de que os moleste dormir con luz. Además es un primer piso en el que no para el ascensor, hay que subir por la escalera, por si sois de ir muy cargados de equipaje.

    Tomamos un primer tren, a las 10:15 horas, hasta Parma. En este trayecto no tenemos los asientos asignados pero hay suficiente hueco para todos. No nos pidieron los billetes en ningún momento.

    Llegamos a Parma a las 12:08 horas, donde tenemos diez minutos para coger el segundo tren, que nos llevará a la estación central de Milán. En este sí que el revisor nos pide los billetes nada más subir, además tenemos los asientos asignados.

    Llegamos a Milán a las 13:50 horas. Nos da tiempo a comprar sobre la marcha los billetes para el próximo tren a Bérgamo, que sale a las 14:05 horas. Cada ticket nos cuesta 6€. 

    BÉRGAMO

    Llegamos a Bérgamo a las 14:52 horas. Estamos muertas de hambre pero el restaurante que traía fichado está cerrado a estas horas por lo que, aunque no me hace ninguna ilusión, acabamos en el McDonald’s para ahorrar tiempo… Tras una comida rápida, nuestra segunda parada es en el supermercado para comprar provisiones para el desayuno de mañana.

    Llegamos a nuestro alojamiento, el Scotti’s House Bergamo, a las 16 horas. Tenemos una habitación enorme perfecta para nuestra estancia de una noche. Además como zonas comunes con los otros huéspedes tenemos salón, comedor y cocina que tienen una pinta buenísima. Solo le faltaría un microondas.

    Quince minutos después estamos listas para explorar la ciudad. Bérgamo está dividida en dos partes:

    • La ciudad alta (Città Alta): ubicada en la zona más elevada. Su centro histórico está rodeado por una muralla veneciana.
    • La ciudad baja (Città Bassa): pese a que también es de origen antiguo y conserva sus barrios históricos, es la parte más moderna, donde se han construido las nuevas zonas residenciales.

    Os dejo mi track de Wikiloc para que podáis seguir nuestro itinerario con facilidad.

    Powered by Wikiloc

    Mi idea es ir directa hasta la parte más elevada de la Ciudad Alta para aprovechar las pocas horas de luz que nos quedan y poder contemplar así las vistas de Bérgamo. Para ello vamos raudas y veloces hasta la primera estación de funicular.

    Podéis sacar los billetes tanto en la taquilla (se puede pagar con tarjeta) como en las máquinas ubicadas al lado de la misma, que se pueden poner en español. El precio es el mismo de cualquiera de las dos maneras. Os dejo el vídeo de cómo usar las máquinas.

    Pagamos 1,70€ por cada ticket, solo de ida. Ida y vuelta cuestan 3,40€, no hay descuento por sacarlos a la vez.

    Hay que validar los billetes justo antes de pasar los tornos para acceder al funicular. Desde el momento de la validación (no de la compra) tienen una duración de setenta y cinco minutos en los que puedes usar el funicular las veces que quieras. 

    Este primer funicular tiene una única parada, en la que debemos bajar de forma obligatoria. Como nosotras queremos subir hasta el castillo de San Vigilio, debemos dirigirnos a la próxima estación de funicular, ubicada a setecientos cincuenta metros de esta en la que nos encontramos. Para ello debemos atravesar las dos calles principales de Bérgamo, que están llenísimas de turistas y que tienen una pinta chulísima con ese aire medieval, unos edificios preciosos y esos locales comerciales tan coquetos. Nos encantaría pararnos para disfrutarlos con calma pero, como os decía, las horas de luz de noviembre juegan en nuestra contra a pesar de que aún no se ha producido el cambio horario. Avanzamos lentamente entre la marabunta de gente hasta llegar a la segunda estación del funicular a las 17 horas. En este caso NO hay que validar el ticket de nuevo, solo mostrárselo al revisor, ya que nos encontramos dentro de ese periodo de setenta y cinco minutos.

    Bajamos en la primera y única parada. Al salir de la estación giramos a mano derecha y alucinamos con las vistas que tenemos sobre la Ciudad Baja. ¡¡Menuda belleza!!

    Continuamos ascendiendo por esa calle, la vía al Castello, rumbo al castillo de San Vigilo. Nos llevamos un chasco enorme pues un trabajador de lo más desagradable nos echa de malos modos indicando que está a punto de cerrar. ¿¿¿A las 17:15 horas??? Menudos horarios más limitados… Nos quedamos con la miel en los labios sin poder disfrutar de las vistas. Suerte que pudimos contemplar por lo menos las panorámicas a la salida del funicular.

    Decidimos desandar camino pero esta vez a pie, rumbo al centro de la Ciudad Alta, a ver qué descubrimos. Las vistas en esta bajada no son muy diferentes de lo que vimos antes, por lo que podéis hacerlo de nuevo en el funicular sin perderos nada. También es cierto que el tramo es corto, por lo que no cuesta nada hacerlo andando.

    CONSEJO: os recomiendo que traigáis calzado cómodo puesto que el suelo es empedrado como buena villa medieval que es.

    A pesar de que las previsiones climatológicas para hoy eran de lluvia intensa y frío, estamos disfrutando de un día soleado y caluroso perfecto para explorar Bérgamo. ¡¡Qué ilusión!!

    Nos acercamos hasta el parque de San Giovanni, que traía marcado en mi mapa. Tiene unas vistas preciosas con una luz espectacular en este momento. Merece la pena venir hasta aquí.

    Enlazamos con la plaza Lorenzo Mascheroni que me llamó la atención cuando subíamos, con ese aire tan medieval.

    Me encanta recorrer la vía Bartolomeo Colleoni, tiene muchísimo ambiente y es muy bonita. Algunos de los locales son de lo más llamativos y pintorescos.

    Cuando llegamos a la plaza Vieja o piazza Vecchia quedo sorprendida por su belleza. La componen varios edificios preciosos que iluminan justo cuando llegamos. No podemos acceder a la mayoría de ellos porque cierran demasiado pronto. Os recomiendo subir hasta el palazzo della Ragione para contemplar la plaza desde lo alto. 

    Además en este caso sí que lo podemos visitar por dentro, gratis. Merece la pena entrar tanto por las obras tan antiguas pintadas en sus paredes como por su gnomon, un curioso reloj solar que encontraréis en el suelo. Fabricado hace más de doscientos años, en 1798, sigue indicando con precisión el mediodía local y la fecha exacta gracias a un único rayo de luz golpeando la meridiana grabada en el mármol.

    La basílica de Santa María la Mayor, que es espectacular y bellísima por fuera, también la están cerrando justo cuando llegamos… ¡¡¡Qué rabia!!! Con lo maravillosa que es por fuera, no me puedo imaginar su interior…

    Por suerte la catedral de San Alejandro, ubicada al lado de la anterior, sí que la podemos visitar, de forma gratuita. Aunque por fuera no es tan llamativa al estar eclipsada por la basílica de Santa María la Mayor, por dentro me parece un espectáculo, entre el suelo tan simétrico y los preciosos frescos del techo, todo decorado con toques dorados. Hemos entrado en plena misa mientras el párroco realiza su cántico, lo que hace el recorrido aún más celestial. Me ha gustado y sorprendido muchísimo. En este viaje he descubierto que la cámara de mi móvil Samsung Galaxy S22 ultra tiene la opción de usar el «modo noche» en formato gran angular, y eso me abre un mundo de posibilidades, lo que os muestro con las imágenes inferiores.

    Al salir, el sol casi se ha puesto por completo mejorando aún más la belleza de los edificios iluminados.

    Enlazamos con la vía Gombito que, al igual que su contigua vía Bartolomeo Colleoni, tiene un aire medieval encantador.

    Es una lástima que no nos haya dado tiempo a ver la Ciudad Alta con luz, porque es tan bonita… Además prácticamente todos los monumentos imprescindibles que traía anotados para visitar ya están cerrados… Por suerte he visto vuelos directos desde Asturias a Bérgamo entre 9 y 22€, por lo que tengo claro que volveré.

    Compramos en una de las pastelerías más famosas, Nessi Bérgamo Alta, uno de los dulces típicos de la ciudad, las polentas. Relleno de chocolate, estaba muy dulce y delicioso. Aprovechamos para aprovisionarnos con unas porciones de pizza para cenar más tarde en el hotel.

    Puesto que estamos cerca, nos acercamos a otro de los miradores que traía anotados y que nos sorprende con unas amplias panorámicas de la Ciudad Baja de noche. Cuanto más descubro Bérgamo, más me enamora esta ciudad hasta ahora desconocida para mí.

    Volvemos a la estación del funicular y sobre la marcha sacamos los billetes en las máquinas para bajar hasta la zona más moderna de la urbe.

    La idea era ir directas al alojamiento, pero nos llevamos una grata y enorme sorpresa porque la Ciudad Baja es una auténtica belleza. Cuanto más recorremos, más quiero explorar: edificios bellamente iluminados, paseos arbolados decorados con guirnaldas encendidas, muchísimo ambiente y, sobre todo, muchas calles con casitas de colores. No había leído nada al respecto y me quedo totalmente maravillada pues parece que hemos regresado al lago de Como o a las Cinque Terre. ¡¡¡Qué bonito!!! 

    Enlazamos una calle detrás de otra cada vez más enamoradas de Bérgamo, que ha sido una sorpresa alucinante. Me quedo con muchísimas ganas de volver y recorrer cada milímetro de estas dos ciudades en una. Me parece totalmente imprescindible dedicarle un día completo, sino dos en caso de que tengáis tiempo, porque el lugar lo merece al 200%.

    Cuando empezamos a ver relámpagos con potentes truenos resonando de fondo, ponemos pies en polvorosa rumbo al apartamento, al que llegamos a las 21 horas. Me siento plenamente feliz por este magnífico descubrimiento que ha sido Bérgamo, y que pone un punto y final excelente a este viaje de siete días por tierras italianas.

    En la última entrada del blog os dejo un resumen con mis opiniones, puntos imprescindibles, presupuesto final, etc… para ayudaros a organizar vuestra propia escapada por Italia.

    GASTOS DEL DÍA

    • Billetes tren a Bérgamo: 18€.
    • McDonald’s: 27,70€.
    • Supermercado Pam: 3,60€.
    • Billetes funicular: 5,10€.
    • Parmesano: 26,70€.
    • Helados: 9€.
    • Cena Nessi Bérgamo Alta: 15€.
    • Funicular: 5,10€.
    • Hotel Bérgamo: 147,34€.

    TOTAL: 257,54€

    POSDATAS

    Posdata 1: todos los puntos visitados a lo largo del día están recogidos en este mapa de «Italia»: ver mapa. Para PASARLO A LA APP MAPS.ME (que es la que me guía en todos mis viajes y rutas por mostrar mucho mejor los senderos que Google Maps y por funcionar a la perfección sin conexión) solo tenéis que seguir estas instrucciones.

    Posdata 2: todas las fotos están hechas con mi móvil Samsung Galaxy S22 ultra sin ningún tipo de filtro o retoque, todas en modo normal o en modo gran angular.

    Posdata 3: me encantaría que dejases un COMENTARIO con tu opinión sobre lo que has leído. ¡Venga, anímate! Siempre se agradece un buen feedback…

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