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2. ÁMSTERDAM – COMIENZA LA AVENTURA
Domingo 30 de octubre de 2022
¡¡Y comienza la aventura!! ¡¡¡Me encanta viajar!!! Recién llegada hace tres semanas de Lanzarote, hoy pongo rumbo a Ámsterdam.
Para evitarnos cualquier tipo de sorpresa en el aeropuerto, peso en casa el equipaje con mi báscula de mano. Este pequeño aparato fue todo un descubrimiento hace ya muchos años, cuando era todo un estrés llegar al aeropuerto y descubrir que habíamos superado los kilos permitidos.
Teniendo en cuenta que el vuelo no sale hasta las ocho de la tarde, he aprovechado el día para ir a comer con mis amigas, a las que hacía meses que no veía.
Últimamente el clima está bastante loco por lo que, aunque estamos a punto de entrar en noviembre, en Gijón (mi ciudad) rondamos los veinticinco grados estos días. Me ha tocado ir vestida de verano a la comida para luego cambiarme con ropa de invierno puesto que en Ámsterdam dan fresco y lluvia casi todos los días.
El autobús (ALSA) que nos conduce hacia el aeropuerto de Asturias arranca puntual a las 17 horas. En cuarenta y cinco minutos ya estamos facturando el equipaje. Soy lo peor en cuanto a elementos imprescindibles por lo que me resulta imposible viajar con solo una maleta de mano. Es superior a mí… Ojalá pudiese pero, por ahora, no lo he conseguido. Por lo menos solo llevo dos maletas pequeñas y ninguna grande en esta ocasión. Os dejo un listado de mis productos imprescindibles a la hora de viajar por si le queréis echar un vistazo.
Llevo la maleta que voy a facturar envuelta con film transparente para, por una parte, disminuir el riesgo de que me la abran e introduzcan o sustraigan algo y, por otra, para localizarla más rápidamente al salir de la cinta de equipaje. La maleta de mano va con cintas de lunares para que también sea más fácil de ubicar.
Tardamos media hora desde que nos bajamos del autobús hasta que nos encontramos delante de la puerta de embarque. Es el único punto positivo que veo de tener un aeropuerto tan pequeño, que todos los trámites se llevan a cabo de forma rápida y ágil.
Aunque cumplimos de forma correcta con los pesos y medidas del equipaje de mano y del bolso de viaje, no nos los revisan ni miran para ellos en ningún momento pese a viajar con Vueling, una compañía «low cost» y por ello más «tiquismiquis» (aunque los billetes nos costaron 190€ por cabeza, así que de «low cost», nada).
Adoro viajar. Lo único que me agobia de volar es tener que llevar las piernas plegadas como sardinas en lata. Por ello siempre que hago viajes largos reservo los asientos en salida de emergencia, pero los de la fila central, no los de los laterales, ya que en los míos puedo poner la maleta de cabina a modo de reposapiés.
En el caso de las compañías «low cost» no tiene sentido pagar por unos asientos u otros porque son todos prácticamente iguales y en ninguno se puede colocar la maleta en los pies. Pero como nunca voy sin un plan B, siempre llevo mi reposapiés plegable. Se cuelga de la mesita del asiento delantero y por lo menos me permite llevar las piernas elevadas (aunque no estiradas), cosa que favorece en parte mi maltrecha circulación.
Aterrizamos veinte minutos antes de la hora prevista.
Al igual que me ocurrió en mi viaje a Dinamarca, mi compañía de teléfono Lowi no conecta el roaming de forma automática cuando enciendo el teléfono (tampoco el segundo móvil que traigo con Simyo) por lo que me veo sin Internet. Qué pereza, de verdad. Me toca programarlo de forma manual. Os dejo las instrucciones que seguí con mi Samsung Galaxy S22 Ultra:
(Me cambié a O2 ese mismo mes, a ver si esta nueva compañía me funciona mejor en el extranjero)
Las maletas facturadas salen sin incidencias y, al lado de la cinta de equipaje, vemos ya la primera de las varias máquinas amarillas que encontraremos para sacar los billetes del tren que nos conducirá al centro de Ámsterdam. El procedimiento para sacar los tickets es muy sencillo. Os adjunto un vídeo explicativo.
Se puede pagar con tarjeta o con monedas (NO con billetes). Pagamos 17,10€ por tres billetes en segunda clase. Los de primera clase costaban 26€ y, según me contaron, la diferencia de precio es por unos asientos un poco más mullidos, y poco más.
(Yo no lo sabía, pero sacar los billetes en la propia máquina de la estación ferroviaria cuesta 1€ más por gestión, no por billete. Al año siguiente volví a la ciudad y los saqué con la app NS)
Seguimos las señales que anuncian la Schiphol Raylway Station, ubicada en la planta inferior a la de llegadas.
Antes de bajar a los andenes hay que fijarse en las pantallas cuál es el que nos corresponde, ya que las distintas escaleras mecánicas conducen a los distintos andenes. A la hora de sacar el ticket en la app NS también nos lo indica.
A las 22.42 horas (hace una hora que hemos aterrizado) tomamos el tren InterCity direct, que va directo (sin paradas) a la Estación Central de Ámsterdam (Amsterdam Centraal).
Tardamos solo quince minutos en llegar a nuestro destino. Validamos los tickets del tren al salir de la zona de andenes.
Al otro lado de los andenes, aún sin salir de la estación, hay varios supermercados abiertos todavía, por si necesitáis comprar provisiones. Nosotras traemos desayuno para todos los días, por lo que no necesitamos comprar nada.
Al salir de la estación quedamos sorprendidas por lo guapo que es el edificio y porque ¡¡ya están puestas las luces de Navidad en las calles!! ¡¡¡No contábamos con ello para nada!!!
Nuestro alojamiento, el hotel Manofa, se encuentra en la misma calle de la Estación Central, a solo quinientos metros de la puerta principal. No puedo creer que hayamos conseguido un hotel tan bien ubicado a un precio bastante módico para ser una capital europea (cuatro noches: 520,02€ + 3€ / persona / noche o, lo que es lo mismo: 46€ por persona y noche). ¡¡Es una pasada!!
En nuestra calle hay muchísimo ambiente y huele muchísimo a marihuana. Voy a acabar medio piripi en este viaje, aún sin tener intención de probar nada…
Al llegar al alojamiento, sorprendentemente nos atienden en español y, además, con gran amabilidad. La semana pasada pagué el hotel a través de Booking y hoy en la recepción nos toca pagar los restantes 12€ por persona de impuestos de la ciudad. Se puede pagar con tarjeta
Todos los pagos de este viaje los vamos a hacer con mi tarjeta Vivid, que utilicé por primera vez en mi viaje a Dinamarca, donde me funcionó a la perfección, sin cobrar comisiones por el cambio de moneda. Os dejo un link para conseguir un descuento a la hora de solicitarla.
Para organizar el tema de los gastos entre las tres vamos a usar la app Settle Up, que es una auténtica gozada. Soy bastante inútil para el tema del cálculo, pero la aplicación es maravillosa y sencillísima de utilizar. Nos hace la vida muchísimo más fácil porque nos lo da todo calculado. La descubrimos en nuestro viaje para visitar la floración de la lavanda en Tiedra (Valladolid) y fue todo un éxito.
Habíamos leído que el hotel tenía cuatro plantas y que las escaleras eran muy estrechas y empinadas (como en la mayoría de edificios de Ámsterdam), por supuesto sin ascensor, pero nada de lo que leímos nos había preparado para lo que nos esperaba. Menudas risas que nos echamos intentando ascender al tercer piso, donde nos habían dado nuestra habitación (la 307), sin caer escaleras abajo. Prácticamente no entraba con una maleta de cabina en cada mano y tuve que subir en diagonal unos escalones que eran a cada paso más estrechos, jajaja.
La habitación, de dieciséis metros cuadrados, está genial para nuestra estancia de cuatro noches, y más teniendo en cuenta el precio y la ubicación del hotel.
Además, desde nuestra ventana vemos la calle principal con las luces de Navidad encendidas y, al fondo, la preciosa fachada de la Estación Central.
¡¡¡Qué ganas de empezar a descubrir mañana la ciudad!!!
GASTOS DEL DÍA
TOTAL: 53,1€
POSDATAS
Posdata 1: todos los puntos visitados a lo largo de este viaje están recogidos en este mapa. Para poder utilizarlos basta con pinchar en el enlace azul de «mapa», NO en el propio mapa.
Posdata 2: todas las fotos están hechas con mi móvil Samsung Galaxy S22 ultra sin ningún tipo de filtro o retoque, todas en modo normal o en modo gran angular.
Posdata 3: me encantaría que dejases un comentario con tu opinión sobre lo que has leído.
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