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    Jueves 12 de mayo de 2022

    COPENHAGUE

    Salimos del hotel, el Next Housen Copenhagen, a las ocho de la mañana, tras hacer el check out sin incidencias. Mi chico dice que él no repetiría el alojamiento por el tamaño de la habitación, de nueve metros cuadrados. Yo no solo repetiría sino que además os lo recomiendo. Para el tiempo que suelo pasar en la habitación de un hotel cuando viajo, no necesito mucho más. Y lo importante, que es el descanso, ha sido excelente: la cama era muy cómoda y amplia y ninguna de las tres noches hemos escuchado un solo ruido. Además, la ducha era bastante amplia para el pequeño tamaño de la habitación.

    Nos dirigimos a la estación central de Copenhague, ubicada a cinco minutos de nuestro alojamiento. En Lagkagehusetla, ya dentro de la estación, compramos el pan para el picnic del día al igual que hemos hecho todas las mañanas. 

    Hoy volvemos a casa de mi familia en Lillerød. Como mi primo me dejó su tarjeta de transporte Rejsekort, bajamos directamente a los andenes 9 – 10 sin necesidad de pasar por las máquinas de sacar tickets. 

    Para tomar el tren, hay que manejar el tema de las tarjetas y los postes de validación, que es muy sencillo. Hay dos tipos de postes para validar las tarjetas:

    • Uno para uso individual.
    • Uno en caso de que vaya más de una persona, o de que haya personas mayores, mascotas, bicicletas…

    Nosotros tenemos que usar este último. PASOS A SEGUIR PARA HACER EL «CHECK IND»:

    • Activar la pantalla en el botón de «play».
    • Pasar la tarjeta por el círculo que tiene la luz azul.
    • La primera opción que aparece es «adultos», que es la que nosotros necesitamos. Tocamos la tecla «+» para añadir un segundo adulto.
    • Pasamos de nuevo la tarjeta por el círculo con la luz azul para validar nuestra petición.

    Cogemos el tren de las 8.23 horas y cuarenta minutos después ya estamos en nuestra estación. Que no se os olvide hacer el «check ud» al bajar del vagón, puesto que sino os cobrarán como si hubieseis hecho el trayecto más largo.

    Desayunamos tranquilamente con la familia mientras nos ponemos al día. A las 11 horas arrancamos el coche rumbo a nuestro primer destino del día.

    FRILANDSMUSEETS

    Vamos a visitar el Frilandsmuseets. «Inaugurado en 1897, se trasladó a su ubicación actual en 1901. Con cuarenta hectáreas, es uno de los museos al aire libre (The Open Air Museum) más grandes y antiguos del mundo. Es un departamento dependiente del Museo Nacional Danés y forma parte de la investigación realizada sobre historia agrícola. El museo cuenta con más de cien edificios de entornos rurales, que datan de 1650 – 1950. Todos los edificios son originales y se han movido pieza por pieza desde su ubicación original, salvo un molino de viento que todavía se encuentra en su ubicación original. El museo contiene edificios rurales de todas las regiones de Dinamarca, incluidas muchas de las islas danesas pequeñas y remotas. En la colección están representadas todas las condiciones de vida social, desde una casa solariega hasta una casa de pobres, diferentes tipos de edificios como granjas, molinos y talleres, y numerosas profesiones. El museo contiene seis molinos, incluido un molino de correos de 1662. Los terrenos del museo también cuentan con veinticinco jardines históricos y paisajes culturales y ganado de antiguas razas danesas. Los jardines y los animales se muestran en conexión con los edificios correspondientes social y geográficamente».

    Tardamos veinte minutos llegar desde Lillerød. Aparcamos delante de la puerta, donde tienen un mini parking

    El museo abre todos los días de 10 a 16 horas y cuesta 105 DKK.

    Iniciamos la visita a las 11.30 horas. Nos hemos propuesto dedicarle un máximo de dos horas puesto que hoy tenemos mucho programado para ver y el complejo es enorme.  

    Vamos recorriendo algunas de las casitas, que son muy coquetas. En su interior tienen recreadas las dependencias como en la antigüedad. 

    Casa de 1773

    El clima que nos acompaña está espectacular porque el cielo tiene montones de nubes blancas que hacen que toda la zona sea mucho más fotogénica. 

    Las enormes fincas tienen árboles llenos de preciosísimas flores que hacen las delicias de alguien como yo. Este viaje a Dinamarca me tiene alucinada en el sentido de que nunca había vivido la primavera de forma tan intensa y tan colorida como hasta ahora. Disfruto muchísimo con cada árbol lleno de frondosas flores o con cada campo de amarilla colza y coloridos tulipanes. 

    En una parte del recinto están las casas más agrupadas y, a medida que te alejas, empiezan a aparecer grandes fincas con sus correspondientes granjas y animales. Hemos visto caballos, vacas, ovejas, cabras, pavos…

    Entre los animalitos de las granjas, las múltiples flores y las preciosas casitas, disfrutamos un montón de la experiencia. De hecho, aunque nos habíamos propuesto dedicarle un máximo de dos horas para que nos diese tiempo a cumplir sin prisa con el itinerario que teníamos programado para el día de hoy, estábamos pasándolo tan bien que decidimos prolongarlo un poco. Es que hay muchísimo para ver, y eso que nosotros visitamos un porcentaje muy bajo del interior de las casas, porque sino le hubiésemos tenido que dedicar todo el día. Finalizamos la visita después de dos horas y media.

    LYNGBY SØ

    Arrancamos a las 14 horas y estacionamos a menos de dos kilómetros, en la calle Rustenborgvej, que ya traíamos seleccionada recomendados por mi familia. Hemos venido a Lyngby a hacer nuestro picnic del día a orillas de su lago, Lyngby sø (sø = lago). El día está muy ventoso y eso hace que esta visita se vuelva un poco desagradable al ser el lago una zona tan abierta, pero al mismo tiempo mueve las nubes con fluidez provocando bonitos juegos de luces y sombras. 

    Comemos con unas preciosas vistas del lago. Cuando nos disponemos a recorrerlo, el viento sopla con demasiada intensidad por lo que sacamos unas fotos rápidas y ponemos rumbo a nuestra próxima visita. 

    Lástima no haber podido descubrir un poco más este paraje, pero de repente empezó a hacer muchísimo frío.

    También teníamos anotado visitar por la zona el bosque de Den Gamle Køkkenhave, porque me encanta la naturaleza. Como alargamos un poquito más de la cuenta la visita en el museo al aire libre, decidimos saltarnos el recorrido por el bosque. Por suerte en Asturias, donde vivimos, tenemos toda la naturaleza que podamos desear.

    JÆGERSBORG DYREHAVE

    Arrancamos a las 15.15 horas y tras veinte minutos aparcamos en un amplio parking que también habíamos seleccionado previamente. Con la app EasyPark descubrimos que el aparcamiento es de pago.

    Ya me había registrado en la aplicación desde España y había metido una tarjeta de pago (Bnext), por lo que desde la misma EasyPark realizamos el pago del parking. Como no sabemos cuánto tiempo vamos a estar, de base ponemos tres horas y luego sobre la marcha se puede reducir o ampliar el tiempo. Lo único que hay que tener en cuenta es que hay que confirmar que la zona del parking que marcan las señales físicas coincida con la zona que nos marca la aplicación, en nuestro caso se trata de la 3680. (Tardaron dos días en pasarme el cargo a la tarjeta Bnext)

    Nos ponemos en marcha y no tardamos en adentrarnos en el Dyrehaven, que en danés quiere decir «parque de los ciervos» (oficialmente Jægersborg Dyrehave). Venimos atraídos a este lugar porque he leído que se pueden ver familias de ciervos salvajes. «Se trata de un parque de unos once kilómetros cuadrados que se caracteriza por su mezcla de grandes árboles, robles antiguos y grandes poblaciones de ciervos y gamos«. ¡¡¡Qué emocionanteeee!!!

    Os dejo mi track de Wikiloc para que os sea más sencillo seguir el itinerario.

    Powered by Wikiloc

    El parque, que es enorme, se puede recorrer en calesas tiradas por caballo, en bicicleta o a pie. Nosotros nos decantamos por esta última opción.

    Nos llama enormemente la atención ver que hay muchísimos árboles caídos, lo que desluce bastante el paisaje. No sabemos si habrá sido por tormentas eléctricas o qué, pero aquello parece una «matanza de árboles».

    Más tarde mi familia me explicó que el tema de los árboles está así por dos motivos:

    • Porque en Dinamarca no se retiran los árboles para no alterar la biodiversidad.
    • Como no hay riesgo de incendios, no es necesario retirar la madera seca, como sí que ocurre en España.

    Como la idea era tratar de ver algún ciervo, vamos ojo avizor mirando de un lado para otro hasta que vemos el primero. Se trata de una pequeña cierva de lo más asustadiza. Nos extraña que no vaya en manada, además de su color. Nunca había visto un ciervo blanco. Disfrutamos fotografiándola desde la lejanía.

    Puesto que el parque es enorme, nos habíamos propuesto llegar solo hasta el pabellón de caza del Hermitage Eremitageslottet o Hermitage Hunting Lodge, que tenía muy buena pinta en Google Maps. Os dejo las imágenes que sacamos de camino a la edificación.

    «El pabellón, de estilo barroco, fue construido en 1734 para Christian VI de Dinamarca con el fin de albergar banquetes reales durante las cacerías que la realeza llevaba a cabo en Dyrehaven«.

    Cuál será nuestra sorpresa cuando al llegar a la construcción la vemos completamente rodeada de andamios. Vaya chasco…

    Justo delante del pabellón de caza se abre una hermosa pradera con el bosque al fondo. Con esas nubes tan espectaculares, la panorámica era asombrosa. 

    Cuando nos disponíamos a dar media vuelta, ya que el pabellón era el tope de distancia que nos habíamos marcado, vemos en la pradera, muy a lo lejos, lo que podría ser una manada de algo, aunque también podría ser un conjunto de piedras, puesto que está muy lejos y no se aprecia. El caso es que tenemos un debate de si acercarnos o no a explorar ya que estaríamos añadiendo unos dos kilómetros extra al itinerario de hoy, quizás para no ver nada. Finalmente gana el «sí» y nos ponemos rumbo al otro lado de la pradera. No llevamos las expectativas muy altas porque no queremos llevarnos otro chasco. 

    Cuando estamos lo suficientemente cerca vemos que no solo estábamos en lo cierto sino que tenemos delante de nosotros cientos de ciervos pastando con calma entre pájaros y patos. La estampa parece salida de la película del Rey León. Ay Dios mío, ¡¡¡qué emocionanteeeeeee!!!!! ¡¡¡No me lo puedo creer!!! ¡¡¡Jamás había visto tantísimos ciervos juntos!!!

    Está claro que son salvajes al 100% porque son de lo más asustadizos. No puedes acercarte ni a cincuenta metros ya que todos salen huyendo por más despacio que te arrimes. (Fotos inferiores hechas con zoom)

    Pensé que serían como los del parque de Nara en Japón, que están acostumbrados a que la gente les dé de comer y son de lo más sociables.

    Nara
    Nara

    En el caso del Dyrehaven es un poco fastidio porque no puedes hacer ni una foto medianamente decente; pero por otra parte, ver una manada tan poblada de ciervos a tan poca distancia me parece un lujo difícil de describir. 

    Me llama la atención que entre tantos cientos de ciervos solo haya alguno blanco puntual. El primero que nos encontramos al principio debe de ser bastante especial. No sé si serán ciervos albinos, pero en Internet encontré que: «solo 1 de cada 30.000 ciervos padece albinismo, por lo que son ejemplares excepcionales«.

    No me puedo creer que hayamos vivido esta experiencia. ¡¡¡Menuda pasada!!! Nosotros buscando algún ciervo aislado entre los árboles y de repente nos encontramos con una manada de cientos de ellos. Buscando luego tanto en Google Maps como en Wikiloc en ambos mapas se ve la manada en el mismo punto, por lo que si queréis encontrar ciervos, yo os recomendaría que empecéis por allí.

    De la que vamos desandando camino nos encontramos con otra pequeña manada compuesta por nueve miembros. Esta apenas nos llama la atención porque todavía venimos con la boca abierta de lo que acabamos de ver. 

    BAKKEN

    Salimos del Jægersborg Dyrehave y enlazamos con Bakken a las 17.45 horas. «Está considerado el parque de atracciones más antiguo del mundo. Fue construido en 1583 cuando se descubrió un manantial de agua pura en el parque de los ciervos, con el que limita. Muchas personas llegaban allí buscando agua, tanto por su calidad como por las propiedades curativas que se le atribuían y, poco a poco, se fue convirtiendo en una reunión de entretenimiento hasta que se decidió construir el parque de atracciones«.

    Pese a lo interesantísimo de su historia desde mi punto de vista, damos un paseo rápido. Estamos tan cansados que en quince minutos ponemos rumbo al parking. Ya llevamos cinco días en Dinamarca y estamos caminando más de doce kilómetros cada jornada, por lo que la fatiga empieza a pesar un poco. 

    Habíamos marcado en la app del parking que contábamos con estar tres horas estacionados, pero hemos llegado treinta y dos minutos antes, por lo que desde la misma aplicación pulsamos «parar parking» y ya nos indica el importe definitivo: 27,48 DKK.

    Wikiloc dice que hemos caminado casi ocho kilómetros en esta aventura. ¡No ha estado nada mal!

    Powered by Wikiloc

    Llegamos a casa a las 18.45 horas, agotados pero satisfechos con todo lo que hemos visto en el día de hoy.

    GASTOS DEL DÍA

    • Pan para el picnic: 68,85 DKK = 9,31€.
    • Tren a Lillerød: 91 DKK = 12,5€.
    • Supermercado: 90,2 DKK = 12,19€.
    • Frilandsmuseets: 210 DKK = 28,37€.
    • Parking Bakken: 27,48 DKK = 3,69€.

    TOTAL: 487,53 DKK = 66,06€

    POSDATAS

    Posdata 1: todos los puntos visitados a lo largo de este viaje están recogidos en este mapa. Para poder utilizarlos basta con pinchar en el enlace azul de «mapa», NO en el propio mapa.

    Posdata 2: todas las fotos están hechas con mi móvil Samsung Galaxy S10+ sin ningún tipo de filtro o retoque, todas en modo normal o en modo gran angular.

    Posdata 3: me encantaría que dejases un comentario con tu opinión sobre lo que has leído.

    Puedes seguirme en mi INSTAGRAM para estar al día de todas mis aventuras.

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