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    (DÍA ANTERIOR)

    Domingo 14 de mayo de 2023

    Hoy es nuestra última mañana en la isla de La Palma. Me da mucha pena… Lo bueno es que el vuelo no sale hasta las 17 horas por lo que podemos aprovechar parte del día para recorrer nuevamente Santa Cruz de La Palma, la preciosa y colorida capital de la isla.

    Para evitarnos cualquier tipo de sorpresa en el aeropuerto, pesamos el equipaje con mi báscula de mano. Este pequeño aparato fue todo un descubrimiento hace ya muchos años, cuando era todo un estrés llegar al aeropuerto y descubrir que habíamos superado los kilos permitidos.

    Desde el móvil hacemos el check in con Iberia, ya que no se puede hacer hasta veinticuatro horas antes del vuelo y ayer no nos acordamos. A mi chico y a mí nos tocan asientos en filas muy separadas, pero ya lo arreglaremos cuando subamos al avión.

    A las 10.45 horas hacemos el check out, sin incidencias. Aunque nuestro apartamento, el Donde AbueLía, está bien en general, yo NO volvería a alojarme aquí exclusivamente por el hándicap del termo del agua caliente, que tiene una capacidad de solo treinta litros. No soy para nada alguien a quien le guste derrochar agua pero, después de pasar fuera cada día casi doce horas y venir agotada a casa, lo único que pido es poder darme una ducha relajante de agua caliente. Por lo demás el piso es amplio, luminoso, tiene múltiple almacenaje y espejos, que permiten que mientras uno está usando el baño el otro pueda ir preparándose en el salón o en la habitación. Había toallas suficientes para ir cambiándolas, cosa que no suele ser habitual. Hemos podido aparcar en la misma calle del apartamento, a veces un poco más cerca, a veces un poco más lejos, todos los días. La ubicación no estaba mal, eso sí, se encontraba en la parte alta de Santa Cruz por lo que hay que bajar bastantes escaleras o empinadas cuestas para llegar hasta el centro andando, a donde se llega en diez minutos. Tengo claro que la próxima vez que venga me alojaré en este apartamento que regenta Ricardo de La Palma Free Tours.

    SANTA CRUZ DE LA PALMA

    Nos acercamos a visitar la cárcel de la isla, ubicada a solo cuatro minutos andando de nuestro alojamiento. Me llamó la atención el otro día desde el coche porque pese a ser una prisión, me parece llamativo que también tenga en la parte frontal de la fachada el típico balcón de La Palma. 

    Tras una foto rápida, arrancamos el coche y estacionamos en la avenida Marítima. Tal y como nos explicaron ayer durante el Free Tour, aunque están pintadas las rayas de zona azul, la zona ya NO es de pago. De hecho ni siquiera hay parquímetros. Eso sí, está prohibido dejar el coche aparcado más de dos horas seguidas en el mismo sitio, aunque no hay ningún cartel que informe de estos aspectos.

    El clima está muy agradable y las calles están supertranquilas sin apenas gente. Podemos recorrer cada rincón sacando todas las fotos que queremos sin interrupciones. Ayer a la hora del Free Tour también estaba todo bastante calmado pero al cabo de un par de horas las calles se llenaron de terrazas y de gente por todas partes.

    Recorremos la zona de los balcones de la avenida Marítima, una de las estampas más representativas de la ciudad. Según explican los carteles informativos: «admirados en sus libros por los distintos viajeros que visitaron la isla en el siglo XIX y pintados a plumilla, al óleo y a la acuarela por artistas locales, estos balcones de madera constituyen el mejor conjunto de saledizos conservado en Canarias. Su peculiaridad viene dada, generalmente, por las distintas tipologías de balcón que se reúnen en tan corto espacio y, de manera especial, por la cantidad y calidad de los llamados balcones dobles, de influencia lusitana, que recuerdan las adufas portuguesas. Se trata en realidad de un recurso ideado para la ventilación de las viviendas de dos o más plantas de la calle principal por su parte trasera, el lado de la marina o naciente, desde donde los moradores gozaban de la acción de los vientos alisios, frescos y húmedos. Muchos de ellos cuentan en los extremos con un tablero de cubrición donde se alojaban los escusados o retretes, cuyas aguas fecales caían a la calle para desembocar en la orilla del mar«.

    Me parecen preciosos con esas florecillas que les dan un toque de lo más colorido.

    Disfruto mucho recorriendo las distintas callejuelas, tan pintorescas, donde siempre descubres algún rincón bonito. Teníamos muchas ganas de conocer la capital y por eso precisamente nos alojamos en el apartamento Donde AbueLía, pero al final organizamos un itinerario tan apretado y entretenido que podríamos habernos alojado en cualquier otro lugar que fuese lo suficientemente equidistante de los distintos puntos de la isla. 

    Ballena Pascual
    Playa de Santa Cruz de La Palma

    CONSEJO: os recomiendo mucho que le dediquéis mínimo una mañana, porque es una ciudad preciosa.

    Aprovechamos para comprar varios souvenirs en la calle O’Daly, la calle principal, ya que son nuestras últimas horas de estancia en la isla. Pese a estar en pleno centro, los precios me han parecido muy económicos con respecto a Lanzarote y Fuerteventura.

    Elegimos para comer el restaurante El Casino, recomendados por Ricardo de La Palma Free Tours. De hecho venimos los tres a comer a modo de despedida, porque luego él también tiene que tomar un avión rumbo a Tenerife, y así vamos juntos al aeropuerto.

    Comemos en el patio interior de una antigua casona construida a finales del siglo XVIII. «Adquirida en 1931 por la Sociedad Cultural, su interior ha sido alterado en sucesivas reformas. La entidad, conocida popularmente como Casino de Santa Cruz de La Palma, se ha distinguido por el programa de actividades lúdicas desarrolladas en sus instalaciones y por su empeño en la divulgación de la historia de la masonería en La Palma, corriente filantrópica, simbólica y filosófica que llegaría a contar con varias logias en la isla durante los siglos XIX y XX«.

    Qué rabia que no tengan papas arrugadas, pues serían nuestras últimas papas hasta la próxima vez que vengamos a Canarias, que tengo claro que será muy pronto… Me encanta pedir papas con mojo siempre que salgo a comer fuera, ¡¡qué ricas están!!

    Pedimos para compartir:

    • Alioli: 1,20€.
    • Mojo: 1,20€
    • Croquetas variadas (tres de cocido y tres de almejas marineras): 6,50€.
    • Ensaladilla de boniatos y langostinos: 9,50€.
    • Ensalada Casino: 10€.
    • Pulpo a la plancha (fuera de carta): 15€.
    • Langostinos y calamares crujientes: 17€. 

    Tardan mucho en servirnos la comanda a pesar de tener el restaurante casi vacío. Suerte que hemos venido con tiempo más que de sobra para ir al aeropuerto, porque entre el primer y el último plato han pasado cuarenta y cinco minutos. Me ha parecido bastante mal…

    Los platos que más me gustaron fueron el de ensaladilla y el de langostinos con calamares crujientes, que estaban muy buenos. Los otros diría que «ni fu ni fa»… Pagamos 68,70€ por todo. Con esto finalizamos nuestra estancia en la isla de La Palma.

    VUELTA A CASA

    Llegamos al parking del aeropuerto a las 16.10 horas. OJO: nos equivocamos y entramos por la planta S2 cuando en realidad los huecos de Cicar están en la S1. Aparcamos el coche en una plaza cercana a donde lo recogimos el día de llegada. No hace falta dejarlo en una en concreto.

    Acudimos a la ventanilla de Cicar para devolver las llaves. No me piden ni el número de plaza donde hemos estacionado ni ningún tipo de documentación. Devolvemos el vehículo con medio depósito, tal y como nos lo encontramos el primer día.

    Vamos hasta el mostrador de Iberia para facturar la maleta grande, pasamos el control de seguridad sin problemas y nos encontramos delante de la puerta de embarque treinta minutos después de haber estacionado el vehículo.

    Una vez en el avión, en cuanto embarcan todos los pasajeros, la tripulación nos reubica a mi chico y a mí para que podamos sentarnos juntos. Nuestro primer vuelo sale puntual y transcurre sin incidencias. Lo mismo ocurre con el segundo vuelo.

    Llegamos a Asturias a las 23.10 horas. Por suerte nuestra maleta facturada es la segunda en salir por la cinta de equipajes. Iberia me ha sorprendido mucho tanto a la ida como a la vuelta al no olvidar nuestras maletas en Madrid, a pesar de las cortas escalas de unos cincuenta minutos cada una.

    Al entrar en el parking Arias Aeropuerto para recoger el coche descubro que desde el 26 de abril (estamos a 14 de mayo) han subido 1€ los precios diarios, por lo que pasan de cobrar 4,50 a 5,50€ al día. Pagamos 44€ por nuestros ocho días de estancia.

    En la última entrada del blog os dejo un resumen con mis opiniones, puntos imprescindibles, presupuesto final, etc… para ayudaros a organizar vuestra propia escapada a la isla de La Palma.

    GASTOS DEL DÍA

    • Souvenirs: 34,80€.
    • Comida restaurante El Casino: 68,70€.
    • Cactus aeropuerto x 3: 10,50€.
    • Parking aeropuerto: 44€.
    • Gasolina: 12,31€.

    TOTAL: 170,31€

    POSDATAS

    Posdata 1: todos los puntos visitados a lo largo de este viaje están recogidos en este mapa. Para poder utilizarlos basta con pinchar en el enlace azul de «mapa», NO en el propio mapa.

    Posdata 2: todas las fotos están hechas con mi móvil Samsung Galaxy S22 ultra sin ningún tipo de filtro o retoque, todas en modo normal o en modo gran angular.

    Posdata 3: me encantaría que dejases un COMENTARIO con tu opinión sobre lo que has leído.

    Si quieres conocer más a fondo otras islas canarias, aquí os dejo mis diarios.

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