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  • CASCADA DE NOCEDO Y RUTA DE LAS OCHO CASCADAS (Redipuertas)

    Miércoles 26 de julio de 2023

    Dos semanas después de descubrir este post de Escapada Rural con «siete rutas con cascadas por los montes de León», una de mis amigas me dijo que tenía que ir a recoger a su hija al camping de Boñar por lo que quizás podríamos hacer una ruta de senderismo por la zona. Explorando mi mapa de Castilla y León vi que el pueblo de Redipuertas se encontraba relativamente cerca de Boñar. Teniendo en cuenta que soy fan total de cualquier tipo de cascada o salto de agua, una aventura con supuestamente ocho cascadas me pareció un plan excelente.

    Os adjunto la información de los paneles ubicados al principio de la ruta:

    • El valle de Faro esconde un paisaje armónico de cascadas, saltos de agua, praderas y circos glaciares. Ubicado en la localidad leonesa de Redipuertas, forma parte de la Reserva de la Biosfera de los Argüellos, y es uno de los parajes más bonitos que se pueden visitar en la montaña central leonesa.
    • El río de Faro es un curso de agua que salva un gran desnivel a lo largo de un recorrido corto (alrededor de 500 metros en apenas 4 kilómetros), lo que hace que tenga un gran poder erosivo y transformador del paisaje. Las cascadas que observamos a lo largo de la ruta tienen lugar en puntos donde las rocas presentan algún tipo de debilidad frente a la erosión (como fracturas y cambios a rocas más bandas) donde el agua aprovecha para incidir más en el terreno. En estos pequeños desniveles el agua desciende cada vez con más fuerza retroalimentando el poder erosivo y dando lugar a saltos de agua cada mayores.
    • La ruta propuesta recorre ocho de las espectaculares cascadas formadas en el río de Faro, entre las que se encuentran saltos que llegan a superar incluso los cinco metros de altura, como es el caso de la cascada de la Majá de Tala. Se trata de un itinerario señalizado de fácil realización pues discurre por el camino que acompaña al río, desde el cual se tienen una vistas privilegiadas de los saltos de agua. Además todas las cascadas son accesibles por lo que los viajeros más curiosos, siempre con precaución, podrán acercarse a cada una de ellas y disfrutar de su majestuosidad. Se recomienda alzar la vista durante el trayecto para maravillarse de las cumbres calizas quе superan los 2.000 de altitud, como el pico de Faro (2.112 metros) y su «puerta» que se abre hacia Vegarada, el pico Morala (2.141 metros) y la cota más alta del municipio, conocido como pico Huevo (2.155 metros).
    • Si el viajero requiere un descanso en el trayecto, la majá de Tala se establece como un punto idóneo para reponer fuerzas y así proseguir descansado hasta el paraje de la Rubayona, situado a unos 500 metros de la citada majá. Justo antes de cruzar el río de Faro, llegamos al fin de nuestra ruta. Dependiendo de la época del año y del caudal, podremos cruzar el mismo y así poder acercarnos a la impresionante cascada de La Requejá. A partir de aquí deberemos volver sobre nuestros propios pasos.
    • Fuera de la ruta marcada y dejando atrás la Requejá, el visitante puede continuar río arriba, aproximadamente unos 900 metros, y alcanzar los prados de Faro y la majá de Sidorón, donde se podrán observar los primeros saltos de agua que forma el río, justo antes de nacer al abrigo de los picos Huevo y Faro.

    Ruta de las cascadas del río Faro

    Todos los puntos visitados a lo largo de esta ruta están recogidos en este mapa de «Castilla y León»: ver mapa.

    Para PASARLO A LA APP MAPS.ME (que es la que me guía en todos mis viajes y rutas por mostrar mucho mejor los senderos que Google Maps y por funcionar a la perfección sin conexión) solo tenéis que seguir estas instrucciones.

    DATOS PRÁCTICOS DE LA RUTA:

    Parking:

    • Se puede dejar el coche en Redipuertas, a lo largo de la carretera general: 43.01283, -5.44351.
    • También hay espacio para unos cuatro vehículos junto al punto de inicio de la ruta: 43.013678, -5.444251.

    Tipo de ruta:

    Yo siempre había pensado que las rutas lineales son aquellas en las que se hace la ida y la vuelta por un mismo camino mientras que las circulares eran en las que la ida se hace por un camino y la vuelta por otro diferente, volviendo tanto en las lineales como en las circulares al mismo punto de partida. Pero un día un experto montañero me sacó de mi error y me explicó que las rutas LINEALES son aquellas que se inician en un punto y se terminan en otro, mientras que las rutas CIRCULARES son aquellas que se inician y finalizan en un mismo punto, independientemente de que la vuelta se haga por el mismo camino o no. 

    Dicho todo esto, la ruta de las cascadas del río Faro es circular, siendo la ida y la vuelta por el MISMO camino:

    • Distancia total (ida y vuelta): ≈ 7,4 km.
    • Dificultad: baja en cuanto a la señalización y en cuanto a la forma física necesaria, aunque a la ida es todo cuesta arriba, pero con un mínimo desnivel.
    • Mis tiempos:
      • Tiempo caminando: 2 horas 30 minutos.
      • Duración total: 4 horas 45 minutos.
    • Punto de inicio de la ruta: 43.01333, -5.4442.
    • Os dejo mi track de Wikiloc para que no tengáis pérdida ninguna.
    Powered by Wikiloc

    NUESTRA RUTA:

    Salimos de Gijón (Asturias) en coche a las 9.30 horas. Siguiendo las indicaciones de Google Maps ponemos rumbo hacia Ruayer en Asturias.

    A medida que nos adentramos en las foces de Ruayer del río Aller el paisaje cambia drásticamente y se ve magnífico con esos imponentes acantilados a ambos lados de la carretera. De aquí parte o finaliza la ruta de las foces de Ruayer que conecta con las foces del río Pino.

    Una vez que llegamos al pueblo de Ruayer las calles empiezan a estrecharse hasta niveles sorprendentes. Menos mal que es mi amiga la que conduce porque yo no habría podido meter mi coche por aquí.

    Tan llamativa es la estrechez de sus calles que al encontrarnos con un vecino le pregunto si la cosa va a ir a mejor o a peor. Nos explica que de aquí conectamos con una pista de tierra en un estado mucho peor. Google Maps ha hecho de las suyas trayéndonos por donde no debía, por lo que nos toca dar media vuelta y poner rumbo al puerto de San Isidro.

    Casualmente hace exactamente una semana que subíamos nuevamente el puerto de San Isidro rumbo al lago de Isoba. De camino pasamos por delante de algunas de las rutas más bonitas que he hecho en Asturias:

    Como siempre que estoy por la zona es parada imprescindible el mirador de Zuvillaga que por fin pillamos con sol, creo que por primera vez en mi vida. Las vistas desde aquí son una pasada y la cascada sin nombre me encanta.

    Se puede dejar el coche en la explanada del mirador

    Aunque parece una broma, Google Maps nos lleva hasta las pistas de la estación de esquí de San Isidro y pretende que subamos la montaña, no sé por dónde… Nuevamente tenemos que preguntar y nuevamente tenemos que desandar camino. Es de lo más surrealista la situación…

    Pasamos por delante del lago de Isoba donde la semana pasada hicimos una ruta espectacular, de las más bonitas que he hecho en los últimos tiempos.

    Rodeamos parte del embalse del Porma, donde nos detenemos en uno de sus miradores para contemplar el espectáculo.

    Paramos brevemente en el camping de Boñar para recoger a la hija de mi amiga y ponemos rumbo hacia Redipuertas, donde se encuentra nuestro objetivo de hoy.

    Por el camino vemos la señalización de una cascada y, como no hay cosa que más me guste que un buen salto de agua, tenemos que parar sí o sí. Hay una pequeña zona de parking en el lateral de la carretera. Me sorprende la cantidad de vehículos y de gente que encontramos en un lugar tan recóndito como este.

    Al parecer vamos a visitar la cascada de Nocedo, cascada de Valdecésar o Cola de caballo. Cuando iniciamos el sendero y vemos varias pasarelas metálicas bien dispuestas, ya empiezo a sospechar que lo que venimos a visitar no es una simple cascada.

    Al finalizar la última de las pasarelas, tras unos trescientos metros de recorrido, atravesamos un estrecho tramo rocoso y no conseguimos cerrar la boca de la sorpresa. Nos encontramos con una altísimo y espectacular salto de agua que me deja totalmente boquiabierta y feliz como una perdiz. ¡¡Menuda sorpresa tan espectacular!! La cascada tiene una altura de cuatro metros y se forma ante el desnivel que tiene que salvar el arroyo Valdecésar en su búsqueda del río Curueño. Un salto de agua que se desliza por una grieta abierta entre dos macizos rocosos creando un espacio natural pintoresco, pero a la vez muy llamativo.

    Aún flipando con este apoteósico descubrimiento, ponemos rumbo al coche y continuamos serpenteando por esta carretera de montaña que atraviesa unos paisajes preciosos.

    Por fin llegamos a Redipuertas a las 13.30 horas, cuatro horas después de haber salido de Gijón. Menos mal que madrugamos para aprovechar el día al máximo porque no me puedo creer que hayamos tardado cuatro horas en llegar desde Gijón a nuestro destino en León. Menuda pérdida de tiempo tan grande que hemos tenido por culpa de Google Maps. Una vez que estamos en el pueblo me doy cuenta de que es como ir a Sotres en Asturias, un pueblo alucinante pero totalmente «perdido» en la montaña. OJO porque para acceder a Redipuertas solo se puede llegar por la carretera LE-321 (sentido Valdepiélago → Redipuertas), si no se viene en 4×4.

    Aparcamos en la carretera general del pueblo, cambiamos los playeros por las botas de monte impermeables y nos ponemos en marcha las 13.50 horas.

    El punto de inicio de la senda está claramente señalizado como «ruta de las cascadas del río de Faro», después de pasar la fuente del pueblo.

    CASCADA Nº 1: EL SALTÓN

    A poco más de cien metros de la carretera general nos encontramos con la primera de las cascadas, perfectamente señalizada, «El Saltón». Un precioso salto de agua que va a caer en una maravillosa y redonda poza.

    Es el lugar ideal para llevar a cabo nuestro picnic del día ya que con todo el tiempo perdido ya es la hora de comer. Aunque apetece muchísimo bañarse en esta poza preferimos, una vez finalizado el picnic, ponernos en marcha e ir avanzando, puesto que el día pasa y aún acabamos de iniciar la aventura.

    Se puede llegar a la parte alta de «El Saltón», por si queréis tener una perspectiva diferente.

    A las 14.30 horas nos ponemos en marcha de nuevo y continuamos por la pista de tierra señalizada con pivotes de madera y una flecha negra, hasta llegar a una bifurcación.

    En este punto nos entra la duda de si deberemos seguir recto o bajar por el camino de la derecha. Teniendo en cuenta que el palo con las indicaciones está tirado en el suelo en el margen derecho, tras un debate entre nosotras y tras mirar los mapas con atención, decidimos coger el desvío en el que se encuentra la excavadora. ¡¡ERROR!!

    El sendero de piedra se transforma en un camino por el prado, a veces más visible a veces menos. Tenemos dudas en todo momento de si estaremos yendo por el lugar correcto hasta que nos topamos con una valla con rejas que no podemos atravesar. Vamos rodeándola hasta que llegamos a un punto en el que no podemos continuar y nos damos cuenta por fin de que estamos en el camino incorrecto. Eso nos hace perder aún más tiempo del que ya hemos perdido durante el trayecto en coche, porque hemos caminado 1,2 kilómetros (ida y vuelta) de forma lenta al no haber sendero visible en varios momentos.

    Está claro que o somos muy torpes o quizás hoy tenemos el día completamente gafado, porque estas cosas no me suelen pasar… Toca desandar camino hasta la excavadora y tomar el sendero correcto. Una vez en él ya no hay pérdida ninguna puesto que no hay que salirse en ningún momento del mismo hasta que vamos viendo los distintos desvíos a las cascadas, señalizados todos ellos, aunque la mayor parte tienen el cartel de madera tirado en el suelo y podrían pasar desapercibidos.

    La pista de tierra mantiene un suave y constante ascenso que se hace sin dificultad. El paisaje que nos rodea es una absoluta maravilla.

    CASCADA Nº 2: LAS BAUBAS

    Encontramos el letrero de la segunda cascada, Las Baubas, y al asomarnos vemos un estrecho y empinado descenso lleno de polvillo de tierra que lo hace de lo más resbaladizo. Consigo llegar hasta abajo del todo a duras penas, agarrándome a las ramas, todo ello para encontrarme con un salto de agua sin ningún tipo de relevancia. Para mí sin duda alguna NO merece la pena hacer ese descenso para el premio final que se obtiene.

    Las Baubas

    Yo no lo sabía pero al escribir el post descubrí que: «si os decantáis por bajar hasta la pequeña cascada de Las Baubas, tened en cuenta que si avanzáis unos metros por el margen derecho del río, podréis enlazar más delante de nuevo con la pista forestal».

    Continuamos avanzando por la pista de tierra, maravillándonos a cada paso con el paisaje que nos rodea. Es magnífico y lo tenemos entero para nosotras puesto que no nos hemos cruzado con una sola persona.

    CASCADA Nº 3: LA MAYADUELA

    El cartel de la tercera cascada, La Mayaduela, nos lo encontramos tirado en el suelo partido en dos. Nos adentramos por el sendero y luego, un poco a ojo, giramos por donde creemos que vamos a llegar a la cascada.

    Descubrimos un par de preciosos saltos de agua y un par de pozas muy coquetas, donde la niña acaba dándose un chapuzón y yo me contento con mojarme hasta los tobillos puesto que el agua está bastante fría y una ya tiene una edad, jajaja.

    CASCADA Nº 4: LA QUEMADA

    Después de refrescarnos un rato seguimos avanzando por el mismo sendero de siempre hasta llegar a la cuarta de las cascadas, La Quemada.

    Estos saltos de agua también nos gustan un montón y mientras nos sacamos fotos, las perras disfrutan lanzándose en bomba al agua. Fue supergracioso.

    Vistos desde arriba
    Vistos desde abajo

    CASCADA Nº 5: REGUERO CÁNDANO

    Seguimos avanzando y nos encontramos tirado en el suelo el único cartel hasta ahora que nos manda a desviarnos a la izquierda para visitar la quinta de las cascadas, el reguero Cándano.

    Lo único que vemos es el curso del riachuelo con poco caudal, pero ningún salto de agua.

    CASCADA Nº 6: LA FUENTE

    Nos ponemos en marcha de nuevo y hallamos otro cartel tirado en el suelo que nos marca la sexta de las cascadas, La Fuente.

    Nos topamos con un salto de agua bonito pero no muy diferente de todo lo que venimos viendo hasta ahora. Cuando tienes tantas mini cascadas para elegir, empiezas a ponerte cada vez más exigente, jajaja.

    CASCADA Nº 7: LA MAJÁ DE TALA

    Siguiente cascada también con el cartel tirado en el suelo, la número siete, La Majá de Tala.

    Aunque en las fotos no se aprecia su altura, esta es la más espectacular de todas con las que nos hemos encontrado puesto que es la más alta, a pesar de que lleva poquita agua. La bajada hasta los pies de la cascada es muy empinada por lo que finalmente no me animo a llegar hasta abajo del todo porque tengo miedo de luego no poder ascender. Lo bueno es que desde las alturas se ve a la perfección.

    Continuamos avanzando y nos topamos con un amplio rebaño de vacas, varios terneros e incluso dos toros. Tenemos que atravesarlo para llegar hasta la última de las cascadas por lo que atamos en corto a las perras y vamos un poco tensas ya que no sabemos cómo van a reaccionar los animales. Os adjunto el vídeo que grabé a la vuelta, porque a la ida preferí no grabar y estar bien atenta a lo que pudiese ocurrir, que por suerte no fue nada.

    CASCADA Nº 8: LA REQUEJÁ

    El último cartel que encontramos señaliza la cascada número ocho, La Requejá, así como que este es el fin de la ruta.

    Atravesamos el riachuelo y caminamos varios metros pero no encontramos ni rastro de cascada. Me da rabia porque en el panel informativo del principio de la ruta daban a entender que esta era una de las cascadas más espectaculares: «dependiendo de la época del año y del caudal, podremos cruzar el río y así poder acercarnos a la impresionante cascada de La Requejá». Nosotras no hemos encontrado ni siquiera un salto de agua por lo que desandamos camino, atravesamos el riachuelo nuevamente y vamos caminando un rato curso arriba del río. En la app Maps.me especifica claramente que después de la supuesta cascada de La Requejá se encuentra la cascada La Majá Sidorón. Nosotras no encontramos ninguna de los dos pero sí descubrimos una pareja de llamativas vacas que marcan el punto final de nuestra ruta, tras 5,6 kilómetros recorridos, la mayoría de ellos en un constante y suave ascenso. Iniciamos la vuelta a las 17.45 horas.

    Toca desandar camino hasta el coche sin salirse de la pista, disfrutando simplemente del paisaje que nos rodea que me sigue encantando a cada paso, con los distintos juegos de luces y sombras.

    Finalizamos la ruta a las 18.30 horas (hemos tardado 45 minutos en desandar camino hasta el parking) tras 8,6 kilómetros de recorrido (1,2 kilómetros sobraban al equivocarnos de sendero). Si no hubiésemos tardado cuatro horas en llegar desde Gijón y no nos hubiésemos «perdido» en la misma ruta, la aventura hubiese sido de diez. Los paisajes son una absoluta pasada y algunas de las cascadas y las pozas son un auténtico paraíso. Me ha gustado muchísimo a pesar de los «problemillas» que tuvimos. 

    A modo de COMENTARIOS Y CONSEJOS VARIOS, decir que:

    • Aunque hoy no utilizamos los bastones de trekking, siempre recomiendo llevarlos por si acaso. Los que yo uso son los más básicos del Decathlon. Los tengo desde el 2018, me costaron solo 4,99€ cada uno y me van de lujo.
    • Las botas de monte impermeables no fueron imprescindibles puesto que no nos encontramos con barro.
    • La ruta está bien señalizada, a excepción del camino en el que nosotras nos equivocamos… Por ello yo siempre aconsejo llevar descargado el mapa de Google Maps PASADO A LA APP MAPS.ME, que se puede ver offline (aún sin cobertura). Todos los puntos mencionados en el post están ya metidos en mi mapa personalizado de Google Maps. Os dejo las instrucciones de cómo pasar un mapa a otro.
    • No nos hemos cruzado con ninguna persona, lo que siempre da puntos extra a cualquier aventura.
    • Tardamos un total de 4 horas 45 minutos en hacer toda la ruta, caminando un total de 2 horas 30 minutos según Wikiloc y habiendo recorrido un total de 8,6 kilómetros.
    • Os dejo el link de la ruta en Wikiloc.
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    De forma totalmente surrealista puesto que madrugamos para tratar de aprovechar el día al máximo, aunque salimos de casa a las 9.30 horas no llegamos nuevamente a Gijón hasta las 23 horas, tras 420 kilómetros de conducción. Casi hubiésemos podido ir a hacer la ruta a Madrid… ¡¡Qué cosas!!

    POSDATAS:

    Posdata 1: todos los puntos visitados a lo largo del día están recogidos en este mapa de «Castilla y León»: ver mapa. Para PASARLO A LA APP MAPS.ME (que es la que me guía en todos mis viajes y rutas por mostrar mucho mejor los senderos que Google Maps y por funcionar a la perfección sin conexión) solo tenéis que seguir estas instrucciones.

    Posdata 2: todas las fotos están hechas con mi móvil Samsung Galaxy S22 ultra sin ningún tipo de filtro o retoque, todas en modo normal o en modo gran angular.

    Posdata 3: me encantaría que dejases un COMENTARIO con tu opinión sobre lo que has leído. ¡Venga, anímate! Siempre se agradece un buen feedback…

    Si te apetece seguir explorando Castilla y León, te dejo muchas más aventuras en este link:

    ¿Os gustaría conocer más planes por Asturias? Os dejo un listado por si queréis echar un vistazo:

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