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CASCADA DE LLAMES (San Martín)
Domingo 11 de diciembre de 2022
Después de hacer en noviembre la ruta del Fielato al bosque del Gumial, que tan buen sabor de boca me había dejado, estaba deseando explorar de nuevo los secretos que esconde nuestra tierra, Asturias, «paraíso natural».
Hoy os traigo una ruta cortita que nos lleva a visitar una preciosa cascada a solo media hora en coche de Gijón. Puesto que tuve turno de noche en el hospital y solo dormí tres horas, hemos querido aprovechar el domingo pero sin tener que hacer grandes caminatas.
Como primera ruta corta del día fuimos a la cascada de la Mexona, en Argüero. Es la tercera vez que visito este lugar y nunca dejará de maravillarme. Además, esta era la primera vez que encontrábamos la cascada con bastante agua, lo que por supuesto la hace mucho más bella y cautivadora.
Ya que estábamos cerca, decidimos ir a visitar la cascada de Llames, que hace muchísimo que se encontraba en nuestra lista de tareas pendientes. Esta cascada se encuentra dentro de la ruta de Carlos V (de Tazones a Villaviciosa), una ruta homologada por la Federación Asturiana de Montaña como PR-AS 302.
«El 19 de septiembre de 1517 desembarcó en Tazones el príncipe Carlos de Gante, quien llegaría a ser el Rey Carlos I de España y Emperador del Sacro Imperio Romano-Germánico como Carlos V, el hombre más poderoso de la tierra durante la primera mitad del siglo XVI. Tras ser recibido en Tazones, se trasladó a Villaviciosa, donde estuvo alojado durante cuatro días«. La ruta de Carlos V tiene poco más de once kilómetros pero, como os comentaba antes, hoy queríamos hacer algo light porque apenas había dormido, así que fuimos directos a visitar la cascada.
Todos los puntos visitados a lo largo de esta ruta están recogidos en este mapa de «Asturias variado»: ver mapa.
Para PASARLO A LA APP MAPS.ME (que es la que me guía en todos mis viajes y rutas por mostrar mucho mejor los senderos que Google Maps y por funcionar a la perfección sin conexión) solo tenéis que seguir estas instrucciones.
DATOS PRÁCTICOS DE LA RUTA:
Parking:
Tipo de ruta:
Yo siempre había pensado que las rutas lineales son aquellas en las que se hace la ida y la vuelta por un mismo camino mientras que las circulares eran en las que la ida se hace por un camino y la vuelta por otro diferente, volviendo tanto en las lineales como en las circulares al mismo punto de partida. Pero un día un experto montañero me sacó de mi error y me explicó que las rutas LINEALES son aquellas que se inician en un punto y se terminan en otro, mientras que las rutas CIRCULARES son aquellas que se inician y finalizan en un mismo punto, independientemente de que la vuelta se haga por el mismo camino o no.
Dicho todo esto, la ruta a la cascada de Llames es circular, siendo la ida y la vuelta por el mismo camino:
NUESTRA RUTA:
Tras visitar la cascada de la Mexona, a las 16 horas aparcamos el coche en una explanada en la que aún entraría algún vehículo más.
Toca recorrer doscientos metros por la carretera general. No es mucha distancia pero no hay arcén, la carretera es bastante transitada y los vehículos no pasan especialmente lentos.
Poco después de la casa con la palmera (de la foto inferior), ya vemos al otro lado de la carretera las indicaciones que nos conducen hacia nuestro destino.
Tomamos un bonito sendero cubierto de hojarasca. Estamos ante los últimos coletazos del otoño, y eso se nota.
Mientras recorremos la breve senda, a mano derecha podemos atisbar la ría de Villaviciosa, incluida en la lista de Humedales de Importancia Internacional (RAMSAR). «La Reserva Natural Parcial Ría de Villaviciosa tiene un gran interés botánico debido a la diversidad de especies que alberga y a su buen estado de conservación. Asimismo, muchos de los ejemplares que viven en esta reserva son poco comunes en esta costa. El espacio protegido supera las mil hectáreas y los ecosistemas mejor representados son las marismas, muy poco frecuentes en esta zona. También destaca la presencia de dunas y acantilados«.
Menos de medio kilómetro después de abandonar la carretera general, encontramos un cartel que nos indica que la cascada se encuentra a ochenta metros, bajando por unas escaleras.
Descendemos por los escalones y nos encontramos con un precioso bosque de ribera rodeado de musgo verde intenso. Es una lástima que las fotos no lo reflejen, pero en diciembre hay muy pocas horas de luz y ya solo nos quedaba una hora para el atardecer.
Vemos un segundo cartel que nos invita a seguir el curso del arroyo de Llames.
Toca cruzarlo para pasar al otro lado. Hay muchas rocas en las que apoyarse por lo que esta parte no conlleva dificultad alguna.
Rápidamente nos encontramos con la parte alta de la cascada de Llames. Nos esperábamos poco más que un salto de agua, por lo que no contábamos con que fuese tan alta (unos cinco metros) ni que estuviese tan cargada. ¡¡¡Qué guay!!! Me encanta cuando se puede acceder a la parte tanto inferior como superior de una cascada. Teniendo en cuenta que soy fan total de cualquier tipo de salto de agua, este lugar me parece de lo más hermoso.
Sacamos montones de fotos desde lo alto, pero sin poder entretenernos demasiado porque la luz del sol juega en nuestra contra. Tic tac, tic tac.
Descendemos por unas escaleras talladas en la roca para llegar a la parte baja, después de un kilómetro y medio de recorrido desde el coche. Por el camino encontramos una fuente que data de 1924.
Mientras escribía este post descubrí que junto a esta cascada crece un helecho tropical llamado Woodwardia Radicans, recogido en el catálogo de especies amenazadas de flora del Principado de Asturias y que solo cuenta con una veintena de poblaciones conocidas. ¡Qué curioso!
El hecho de que la cascada esté tan cerca del parking, que sea de tan sencillo acceso, que el bosque esté tan precioso cubierto de verde musgo y que la cascada baje con bastante agua, hace que la excursión haya sido de diez.
Por una parte diría que es una ruta de lo más recomendable para los más pequeños puesto que apenas tienen que caminar, pero por otra parte, el trayecto que hay que hacer por la carretera general me parece un poco peligroso y hay que ir con mucho cuidado.
Sin lugar a dudas es una combinación perfecta juntar la excursión a la cascada de la Mexona con la visita a la cascada de Llames puesto que se encuentran muy cerca la una de la otra y, si una lleva agua, lo más probable es que la otra también la encontremos bien cargada.
Si vais bien de tiempo, siempre podéis aprovechar para explorar la cercana villa marinera de Tazones, elegida uno de Los Pueblos Más Bonitos de España.
A modo de COMENTARIOS Y CONSEJOS VARIOS, decir que:
POSDATAS
Posdata 1: todos los puntos visitados a lo largo del día están recogidos en este mapa de «Asturias variado»: ver mapa. Para PASARLO A LA APP MAPS.ME (que es la que me guía en todos mis viajes y rutas por mostrar mucho mejor los senderos que Google Maps y por funcionar a la perfección sin conexión) solo tenéis que seguir estas instrucciones.
Posdata 2: todas las fotos están hechas con mi móvil Samsung Galaxy S22 ultra sin ningún tipo de filtro o retoque, todas en modo normal o en modo gran angular.
Posdata 3: me encantaría que dejases un COMENTARIO con tu opinión sobre lo que has leído. ¡Venga, anímate! Siempre se agradece un buen feedback…
¿Os gustaría conocer más rutas por Asturias? Os dejo un listado por si queréis echar un vistazo:
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